La tecnología y la educación de la mano.

La evolución tecnológica en los últimos 20 años sembró un precedente que a nuestros ojos será difícil de superar. La incursión del internet trajo consigo cambios que se han dado de manera exponencial acompañado del auge de la computación que a su vez propuso nuevas formas de interactuar con el mundo, con su información.

La educación por su parte ha venido en paralelo adaptándose a las necesidades de las diferentes eras. Remontémonos en la historia a mitad del siglo XVIII, la revolución industrial trajo consigo cambios significativos en la forma de “operar el mundo”. Por su parte, la educación fue adaptada según la necesidad (“preparación de mano de obra para maquilar”) y este ajuste se ha venido atendiendo desde hace más de 200 años.

En la actualidad la tecnología juega un papel muy importante en la manera en “como nos formamos” acercando conocimiento a través de herramientas de consulta, buscadores web, plataformas de aprendizaje, enciclopedias al instante, comunicación inmediata, entre otras.

¿Será el siguiente paso una revolución tecnológica la que cambiará nuevamente el sistema educativo?

Hoy en día la globalización permitida por la tecnología trae consigo que las personas sean cada vez más autodidactas, lo que a largo plazo generará que el conocimiento no sea visto como una institución por la que todos pasamos, sino una parte de nuestro día a día.

Esto deja obsoleto el sistema educativo actual pero no es el fin de la historia.

El próximo gran cambio vendrá con la inclusión en los programas educativos más básicos las  materias de programación, lógica y algoritmos. Cambios que ya se empiezan a realizar y que permitirán que los grandes avances se presenten de forma constante e impactante

Un cambio cuántico

Lo que nos espera para el mañana es un cambio que supere nuestras expectativas, lo que representó el cambio exponencial con el internet y la computación en los años pasados, pero a nivel cuántico.